"El hombre que confundió a su mujer con un sombrero" , de Oliver Sacks.

"El hombre que confundió a su mujer con un sombrero" es un libro peculiar y diferente del neurólogo y escritor británico Oliver Sacks. No es una novela , ni tampoco un ensayo al uso. Estamos ante una recopilación de casos vividos en su experiencia como médico. 

Famoso divulgador científico, Oliver Sacks  compaginó su labor médica con su trabajo como escritor. Su gran aportación a la humanidad fue dar a conocer el funcionamiento del órgano más complejo de nuestro cuerpo: el cerebro. Sin perder de vista la rigurosidad , Sacks se dispone a enseñarnos de una manera amena conceptos que sólo conocen los neurólogos. En " El hombre que confundió a su mujer con un sombrero" se relatan los pormenores de veinte casos clínicos de pacientes aquejados de problemas neurológicos graves. 

El paciente que da título al libro , por ejemplo, es incapaz de descifrar lo que ven sus ojos , lo que le lleva a confundir todo lo que ve a su alrededor. Literalmente confunde a su mujer con un sombrero , y no está loco. Tiene una lesión en su cerebro que no le permite ver las cosas tal y como son.  A lo largo del libro observamos que los pacientes afectados de estas lesiones son capaces de recordar detalles insignificantes de su juventud , confundir los colores de los objetos , no sentir como propias algunas partes de su cuerpo o incluso sentir una melodía de forma persistente en el interior de su cabeza.Como ya he dicho , no son locos , sino personas con problemas neurológicos: lesiones de lóbulos temporales o de ciertas áreas del cerebro encargadas de la percepción o la sensibilidad.

Si se está saturado de ficción y queremos empaparnos de una realidad tan desconocida para el gran público como la neurología , creo que este libro es una buena puerta de entrada . No se hace pesado y pueden leerse sólo aquellos casos que llamen nuestra atención. Son de aquellos libros que agradeces haber leído por la originalidad  y la veracidad de lo escrito. Son casos reales , extraídos de la vida misma , aunque algunos de ellos nos parezcan tan absurdos que parecen sacados de la imaginación del autor.