Más allá de cualquier tópico , pisar tierra irlandesa es bailar con los pies , cantar a la alegría de vivir y respirar aire puro. Porque , en ocasiones, los tópicos sobre un país responden a su esencia. Y en Irlanda los tópicos hablan por sí mismos: Irlanda es verde , acogedora , celta , bebedora y alegre. Su historia no está exenta de violencia y movimientos de rebeldía hacia el imperio. Sus gentes tienen mucho carácter y un orgullo nacional de ser diferentes . Es la tierra de la música y la cerveza, de los estofados de cordero y el pescado rebozado con patatas y una buena pinta de Guinness.
Otro de sus tópicos es la lluvia. En Irlanda siempre llueve , dicen todos. Pues en los días que he estado allí no he olido la lluvia. Es más , incluso los rayos de sol del sur de Europa asomaban tímidamente. ¿ será verdad de la buena lo del cambio climático? Hacía más frío en Barcelona que en Dublín. Cuando aparece un rayo de sol en la ciudad de James Joyce, Bram Stoker, Oscar Wilde o Jonathan Swift , por citar a algunos de sus hombres más ilustres , los dublineses buscan un pequeño banco en St Stephen's Green para aprovechar el buen tiempo. Dublín necesita recorrerse a pie y callejear por sus barrios.
Cuando se aproxima la tarde , sobre las seis aproximadamente , los pubs comienzan a llenarse y los músicos se arremolinan en un rincón para sacar un instrumento y tocar alguna canción típica irlandesa de su extenso repertorio. La música celta es tan animada que invita a bailar y a gozar del día a día sin problemas ni preocupaciones. Es la vida pura hecha música. La eternidad de la felicidad cristalizada en notas de ímpetu y movimiento desenfrenado. La bella Irlanda respira alegría y goce de los pequeños placeres cotidianos. En el pub se encuentra lo mejor de su espíritu y la esencia de sus gentes.
No sé lo que tiene esta tierra que cuando uno vuelve a su patria ya piensa en regresar. Algo de Irlanda queda ya para siempre en nuestro corazón , una parte de ella ha quedado impregnada en nuestro ser y somos conscientes de que , más allá de la distancia, permanecemos ligados a ella por su música . Una tierra legendaria , la isla esmeralda de los vikingos presume de ser uno de los lugares que sacan el lado más festivo y alegre del ser humano.
Gracias, Irlanda, por existir !!
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