El único adjetivo que resume el alegato de este conjunto de discursos elaborados por la activista y política holandesa de origen somalí Ayaan Hirsi Ali es el de valiente. Es uno de los libros más valientes que he leído últimamente.
La historia de Ayaan Hirsi Ali ya es de por sí conmovedora. Nacida en el seno de una familia de clase acomodada de Somalia y fiel seguidora de los preceptos islámicos , Ali fue obligada a casarse con un pariente lejano que su padre había escogido para ella. Dispuesta a no seguir el mismo destino que las miles de mujeres de su país , huyó a Holanda y buscó protección. Su familia la repudió y su lucha por sobrevivir a los imperativos de una religión que niega la libertad a la mujer , fue más determinante que nunca. Actualmente Ayaan Hirsi Ali vive en Estados Unidos , está casada con el hombre que ella ha escogido y se dedica al activismo político y a su faceta de escritora y divulgadora. Cuando escribió "Yo acuso" , uno de sus primeros libros , vivía en Holanda y era muy activa en la política. La publicación de este conjunto de discursos , fragmentos de conferencias y guiones le valió el odio más acérrimo de los fundamentalistas islámicos. Amenazada públicamente de muerte por algunos grupos islámicos radicales , recibe protección y salvaguarda policial desde entonces. Y es que Ayaan no duda en señalar y criticar abiertamente algunas bases del Islam como causantes del atraso , la miseria y analfabetismo de millones de mujeres musulmanas.
En este conjunto de discursos , Ayaan muestra los puntos débiles de algunos textos del Corán que han sido utilizados por los políticos islamistas más radicales para mantener en una posición denigrante a la mujer en el seno de la sociedad. La autora arremete contra pasajes del Corán y algunos preceptos de la Sunna. Más allá de la crítica , Ali defiende una renovación del Islam , una Ilustración a la manera de Voltaire, una secularización de los países que profesan la religión musulmana. Para la autora , el problema del Islam es que no se ha adaptado a los nuevos tiempo , que se ha mantenido como una religión con valores feudales y arcaicos , arraigados en la cultura tribal y de clanes árabe. Según Hirsi Ali , se necesita una separación entre religión y político en los países que profesan la religión del profeta Mahoma.
Aunque sólo sea por la valentía y el arrojo de poner su vida en peligro manifestando sus ideas sobre la necesidad de renovar el Islam , ya vale la pena leer este libro. Hirsi Ali intenta ser a voz silenciada de millones de mujeres musulmanas y habla en nombre de ellas porque sabe que muchas viven en un miedo diario que les impide cambiar sus vidas. Un alegato honesto , conmovedor y provocador que busca remover los cimientos de una religión que somete a la mujer en un papel secundario en el devenir de su historia.
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